Descuentos
Empecemos con los cupones típicos, los de descuento. Es el método más clásico, el de toda la vida. Es el típico cupón que difundimos por las redes sociales o en campañas de email marketing para intentar captar nuevos clientes, y acabar de convencer a esos clientes que dudaban si comprar o no el producto.
Los descuentos pueden ser tanto por porcentaje como con cantidades fijas, y los podemos restringir tanto como queramos. Así pues, los podemos asignar a productos en concreto o a categorías. Por ejemplo “10% de descuento en la sección de alimentación”, o bien “5€ de descuento en la sección de ropa”. O incluso “15% de descuento en esta chaqueta de piel”.
Fijemonos que un cupón no es lo mismo que un precio rebajado, ya que el precio rebajado se mostrará a todos los usuarios, pero en cambio, el cupón es “secreto”, de forma que sólo tendrán el descuento los usuarios que lo sepan e introduzcan.
Este tipo de cupones funciona sobretodo si se limita su uso. Esto podemos hacerlo de forma cronológica, es decir, fijando una fecha máxima para el uso de ese cupón, o por el número de usos, es decir, limitar ese cupón a 30 o 40 usos. Cuando limitemos un cupón, ya sea por fecha máxima de uso como por número de veces, debemos comunicarlo a los usuarios. Que sepan que ese cupón está limitado, para que tengan esa sensación de urgencia o oferta que se pueden perder.
Portes gratuitos
Otro gran clásico. Un cupón con el que te ahorras los portes gratuitos es también un muy buen sistema para acabar de convencer a los usuarios que están sospesando si comprar en tu tienda, o de animar a tus compradores habituales.
Imaginemos que necesitas liquidez puntual. Puedes realizar un mailing a todos tus clientes anunciando un cupón con el que durante 48 horas pueden comprar en tu tienda sin pagar los costes de envío. De esa forma, puedes comprobar dos cosas. Primero, si son sensibles al precio. Es interesante saber si una rebaja puede hacer aumentar las ventas. Y en segundo lugar, tendremos un incremento de facturación ese día, para solucionar los problemas de liquidez.
Regalar un producto
Otra opción muy interesante es la de regalar un producto si el usuario introduce un cupón. Eso lo conseguimos con el plugin Cupón para regalar un producto en WooCommerce. Lo que nos permite es exactamente lo que indica su nombre. Simplemente introduciendo el cupón durante el proceso de compra, el producto de regalo se añade automáticamente en el carrito:
Este sistema es muy interesante porque no sólo nos ayudará a vender, sino que además, al regalar ese producto, le damos la opción al cliente de probarlo. Y eso es un punto clave, ya que al darle esa opción, si le gusta, quizás conseguiremos que luego nos lo compre en futuros pedidos.
La idea de regalar un producto es que el cliente pruebe algo que si o hubiera sido porque se lo hemos regalado, quizás no lo hubiera pedido nunca. Pero ya que se lo regalamos, podemos conseguir que descubra un nuevo producto que luego siga consumiendo. Así pues, es recomendable que el producto que regalemos sea un consumible, que “se agote”, para que luego nos sigan comprando. Así pues, en lugar de un “abrelatas”, mejor regalar una “lata” de algo. ¿Se entiende la idea?